Fringe y el intento de batido de fresa perfecto

Un extraño y inexplicable accidente de avión es el punto de partida de Fringe, en el cual la agente del FBI Olivia Dunham, interpretada por Anna Torv, solicitará la ayuda del científico Walter Bishop,  interpretado por un brillante John Noble, el cual lleva encerrado en una institución psiquiátrica durante los últimos 17 años. La única forma de poder dejarlo salir es que un pariente cercano lo ordene y éste será su hijo Peter Bishop (Joshua Jackson), que no tiene ningún tipo de relación con su padre desde que fue internado en la institución. Juntos empezarán a investigar una serie de sucesos extraños que se dan alrededor del mundo conocidos como El patrón.

El agente Phillip Broyles será el encargado de dirigir la división Fringe y de proporcionar todo lo que Walter necesite para poder seguir investigando  la cadena de eventos que están sucediendo sin explicación aparente.

La agente Astrid será la ayudante personal de Walter en su recuperado laboratorio de la Universidad, y la encargada de mantenerlo a ralla.

Nina Sharp, jefa de operaciones de Massive Dynamic, la empresa líder en investigación científica y tecnológica, será la encargada de ayudarles a encontrar las piezas que faltan para poder resolver los eventos que siguen el patrón. Aunque  según evoluciona la serie, descubriremos que hay más secretos que Nina guarda, que no los que comparte con la divisón Fringe.

Esta serie co-creada por JJ Abrahams, Alez Kurzman y Roberto Orci y fiel sucesora de Lost, a conseguido evolucionar de una manera  brillante, temporada a temporada, conviertiendo pequeñas tramas en una sucesión de eventos que de momento, ha finalizado con un impactante final de temporada. Tendremos que esperar al 23 de Septiembre, inicio de la cuarta temporada, para ver con qué nos sorprenden

Walter Bishop es sin duda el personaje con más carisma de la serie.

Científico con un coeficiente intelectual de 196, fue estudiante en la universidad de Harvard y posteriormente trabajó junto a William Bell en el laboratorio del sótano de la Universidad hasta que hubo un accidente en él,  que dio lugar a un homicidio involuntario y fue detenido y encerrado en la institución mental Santa Clara.

Después de tantos años Walter no sabe como reaccionar o actuar ante las nuevas tecnologías ni tampoco como actuar con otras personas. Dice cosas obvias que nadie más dice y tiende a cantar mientras trabaja porqué le ayuda a pensar.

Otra costumbre que tiene es la de comer y beber mientras hace autopsias. En definitiva, es el arquetipo de científico loco.

Es un hombre con secuelas, consecuencia de tantos años de hospitalización. Está socialmente perjudicado. Habla de forma inconexa y con frecuencia se distrae. Estar cerca de Peter le ayuda, por eso se le permite trabajar en su antiguo laboratorio.

Una de las obsesiones de Walter es encontrar la receta del batido de fresa perfecto. En muchos de los capítulos podemos verlo como utiliza el laboratorio para experimentar con la fórmula para conseguir el sabor exacto que recuerda, antes de que dejara de tomarlos debido a su internamiento. Su obsesión por los batidos, gominolas y dulces de todo tipo llevan a Astrid de cabeza, aunque es una manera de llevar a Walter a un estado mental relajado y seguro, y muchas veces es la clave para solucionar el caso.

La receta que os presentamos hoy no podía ser otra que la obsesión de Walter Bishop: el batido de fresa. Nuestra versión ni mucho menos es perfecta ni siguiendo los criterios y parámetros obsesivos de nuestro protagonista.

Simplemente una bebida refrescante, sabrosa y muy nutritiva. Esperemos os guste.

Batido de fresa y yogur

Ingredientes:

500 gr de fresas frescas o congeladas.
150 gr de azúcar.
2 yogures tipo griego.
200 ml de leche.

Preparación:

Lavamos y cortamos en trocitos las fresas y las ponemos en la batidora. Añadimos el azúcar, la leche, y los yogures y batimos bien hasta que nos quede bien suave,esponjoso y sin grumos.

Servir frío.

¡Recordad! el viernes es el día de publicación del último reto antes de vacaciones,

Bon Appétit. Esperamos vuestras propuestas.

Feliz semana!

Film&Food